El desarrollo de una pluma comienza con una pequeña papila o engrosamiento epitelial que posteriormente se invagina para formar un folículo. La capa más interna de las células epidérmicas que se encuentran dentro del folículo, se diferencian para formar la pluma misma y un núcleo de células dérmicas nutricionales crece de abajo hacia arriba para mantener ese crecimiento. La capa epidérmica que reviste el folículo desarrolla una serie de surcos longitudinales y crestas, que emigran hacia uno de los lados del folículo. En este lado del folículo, un raquis que crece hacia fuera lleva las crestas (ahora barbas) al exterior, sobre sus dos lados para formar una pluma con barbas. Usualmente el crecimiento se detiene, y el núcleo dérmico del folículo se separa. En algunas especies con plumas muy largas, estas pueden crecer durante varios años hasta alcanzar su longitud definitiva
Las plumas con barba sirven para proporcionar un perfil aerodinámico a las aves, impermeabilizan su superficie corporal y forman en gran parte la superficie de sustentación de las alas. En algunas especies, las plumas de las alas o la cola producen sonidos como parte del cortejo ritual. Por el contrario, las lechuzas y búhos tienen flecos en los bordes delanteros y traseros que cubren el dorso del ala en su parte inferior. Estos flecos sirven para silenciar los sonidos producidos durante el vuelo usual. Estas adaptaciones son utilizadas para realizar el ataque silencioso a roedores y otras presas de oído fino.
La función principal de las plumas es la de conservación de calor. Debido a que en casi todas las aves el área de superficie del cuerpo es grande y el volumen pequeño y a que mantienen una temperatura corporal elevada, la conservación del calor es una función muy importante. Las plumas también aumentan la capacidad de flotar en el agua, aumentando el volumen sin aumentar significativamente el peso del individuo.
Las plumas son mudadas y reemplazadas periódicamente. Usualmente la muda en un proceso gradual, de manera que constantemente hay suficientes plumas para permitir el vuelo. Sin embargo, en algunas especies, la muda se realiza totalmente, quedando así estos individuos obligadamente en tierra. Luego de la incubación, el plumón que traen al nacer es reemplazado por un plumaje juvenil. Las mudas sucesivas y el reemplazo de las plumas producen el primer plumaje de invierno, el primer plumaje nupcial, segundo plumaje de invierno y así sucesivamente.
En muchos casos las aves desarrollan plumajes coloridos y llamativos, especialmente el plumaje nupcial de los machos. Los desechos metabólicos coloridos son depositados en las plumas para darles su color.
No hay comentarios:
Publicar un comentario